La época estival nos invita a salir de nuestro territorio con el fin de descansar y desconectar de la a vorágine que hemos tenido durante el resto del año, tal y como hemos hecho siempre, pero este año es diferente en todos los sentidos, qué debemos hacer si nos confinan mientras estamos fuera del domicilio habitual, quién corre con los gastos si no nos dan tiempo a desplazarnos de nuevo a nuestra residencia, el hotel me debe devolver el importe íntegro de mis vacaciones no disfrutadas,…, ahora os resolvemos todas esas dudas.
Cancelaciones:
Si somos nosotros quienes por la cantidad de brotes que hay en el lugar elegido para disfrutar de nuestras vacaciones, sin que haya un confinamiento en dicho lugar o esté prohibida la salida en el territorio donde nos encontramos, deberemos hacer frente nosotros al coste de cancelación, si no tenemos un seguro de cancelación, previamente contratado, por el contrario, si se dan las circunstancias anteriormente descritas, será el establecimiento, transporte o cualquier actividad que tuviéramos contratada quienes nos deban devolver de forma íntegra el dinero que hemos abonado, pues estaríamos ante un caso de fuerza mayor, por ende una imposibilidad sobrevenida.
Quién se hará cargo de los gastos si nos coge el confinamiento fuera de nuestro domicilio habitual y las autoridades establecen que debemos confinarnos allí:
Bien tanto la Organización de Consumidores y Usuarios, como diversos expertos en la materia coinciden en que si se nos obliga a pasar la cuarentena en un hotel o apartamento, debería entenderse como una estancia en un hospital, por ello, correrá con los gastos (no hablamos de gastos extraordinarios, sino los propios que necesita una persona enferma en un hospital) la Administración, si nos obligan a realizar el desembolso a nosotros, tenemos 6 meses desde que nos dejen salir de la cuarentena o confinamiento para solicitar a la Administración que nos reembolse el dinero, pero cuidado sólo el del periodo del confinamiento o cuarentena, no los días que hayamos podido disfrutar sin estas medidas de restricción.
En cambio, si se restringe sólo la movilidad, pero se permite, como ya pasó en el anterior confinamiento, la vuelta a casa, si decidimos quedarnos en el hotel o apartamento, seremos nosotros quienes corramos con los gastos, puesto que si hubiéramos querido podríamos habernos desplazado a nuestra residencia.
Por todo ello desde nuestro despacho recomendamos ser conscientes de la situación actual, disfrutar de nuestro merecido descanso, haciendo siempre caso de las recomendaciones dadas desde las autoridades competentes y si hay que reclamar posibles cancelaciones o estancias “obligadas”, contéis con nosotros para llevarlas a cabo y que no salgáis perjudicados en ningún caso.